Copiaport-E, el megapuerto que amenaza nuevamente las tortugas marinas de Bahía Chascos

por Ago 17, 2022Medioambiente

Ubicada a más de 80 km de la ciudad de Copiapó, Región de Atacama, al sur de la comuna de Caldera, se encuentra Bahía Chascos, un lugar prístino, rodeado de vegetación endémica propia del desierto, cientos de especies de aves marinas, peces, cetáceos, mantarrayas y tortugas marinas. Este es prácticamente el único lugar en el país donde llegan con regularidad estos reptiles provenientes de las Islas Galápagos a alimentarse de sus pastos marinos, que son endémicos de estas costas y están altamente amenazados. La razón: un mega puerto que pretende instalarse en las inmediaciones de este sector y podría traer daños irreparables tanto para la biodiversidad como para los habitantes de esta zona que en su mayoría viven de la pesca artesanal.

 

 Copiaport-E es el proyecto portuario que actualmente tiene bajo amenaza la biodiversidad de Bahía Chascos y sus alrededores. Este proyecto pretende ser instalado específicamente en Punta Cachos, en las inmediaciones de la bahía. Este puerto contempla además un terminal multipropósito y uno de granos, para los cuales se requiere la construcción de un muelle flotante que implica dinamitar el fondo marino con tronaduras.

Este proyecto pertenece a la empresa estadounidense ST. Matthew Assurance Limited (SMA) y  fue rechazado en primera instancia por el Servicio de Evaluación Ambiental, debido a “falta de información esencial” en el estudio de impacto ambiental  que fue presentado por la misma empresa. En 2019, la compañía norteamericana compró Hacienda Castilla, vinculada a la Termoeléctrica Castilla, para dar lugar a la empresa “Copiaoport-e Operaciones Marítimas SPA”. Anteriormente este lugar y las empresas involucradas eran propiedad de Eike Batista, empresario brasileño que se encuentra preso por corrupciónen su país. 

Pese a las tramitaciones que ha tenido este proyecto desde el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), aún no se define su curso. Actualmente se encuentra abierto un proceso de participación ciudadana -debido a que el anterior tuvo varias observaciones de parte de las autoridades regionales- en que cualquier persona, de cualquier lugar del país e independiente de su formación profesional o vinculación con este territorio, puede entregar su visión sobre este proyecto a través de la página web del SEA, estas acciones podrán ser muy relevantes para el futuro de Bahía Chascos.

 

Fotografías de Instagram @altosdecantillana

La importancia de conservar Chascos

Bahía Chascos ha estado amenazada anteriormente, no solo por la Termoeléctrica Castilla, sino también, hasta hace muy poco tiempo, por la construcción  del proyecto Andes LNG, cuyo objetivo sería generar energía eléctrica en base a gas natural por medio de la construcción de un terminal, gasoducto que atravesaría el Desierto de Atacama, hasta una central termoeléctrica ubicada en Vallenar.

Sin embargo, este proyecto fue rechazado por el comité de Ministros de Medio Ambiente, acogiendo los reclamos ciudadanos presentados por el Colectivo en Defensa del Medio Ambiente de Atacama (CODEMA), entre otras otras organizaciones ambientales y dedicadas a la conservación, incluyendo también los Municipios de Caldera y Copiapó.

Para muchos científicos y lugareños, Bahía Chascos es un verdadero paraíso natural que destaca por su biodiversidad, alberga el mayor bosque marino de Alga Macrocystis Pyrifera (huiro flotador), una gran pradera de Zostera Chilensis (Pasto Marino),  además tiene excepcionalmente, aguas bastante cálidas, por lo que es un lugar predilecto para la alimentación de las tortugas verdes (Chelonia Mydas). Este lugar es la agregación de tortugas marinas más austral del Pacífico Oriental,  y la única estable que va quedando en Chile Continental.

Por otro lado, es un  lugar de nidificación para el pingüino de Humboldt, y por allí pasan más de cuatro tipos de cetáceos en sus rutas migratorias, como la ballena franca y la ballena fin; también hay zorros, roedores nativos como el cururo (Spalacopus cyanus), flora del desierto con alto nivel de endemismo como añañucas ( Rhodophiala rhodolirion) y pata de guanaco (Cistanthe longiscapa), entre otras especies de flora y fauna.

La importancia de conservar Chascos

Bahía Chascos ha estado amenazada anteriormente, no solo por la Termoeléctrica Castilla, sino también, hasta hace muy poco tiempo, por la construcción  del proyecto Andes LNG, cuyo objetivo sería generar energía eléctrica en base a gas natural por medio de la construcción de un terminal, gasoducto que atravesaría el Desierto de Atacama, hasta una central termoeléctrica ubicada en Vallenar.

Sin embargo, este proyecto fue rechazado por el comité de Ministros de Medio Ambiente, acogiendo los reclamos ciudadanos presentados por el Colectivo en Defensa del Medio Ambiente de Atacama (CODEMA), entre otras otras organizaciones ambientales y dedicadas a la conservación, incluyendo también los Municipios de Caldera y Copiapó.

Para muchos científicos y lugareños, Bahía Chascos es un verdadero paraíso natural que destaca por su biodiversidad, alberga el mayor bosque marino de Alga Macrocystis Pyrifera (huiro flotador), una gran pradera de Zostera Chilensis (Pasto Marino),  además tiene excepcionalmente, aguas bastante cálidas, por lo que es un lugar predilecto para la alimentación de las tortugas verdes (Chelonia Mydas). Este lugar es la agregación de tortugas marinas más austral del Pacífico Oriental,  y la única estable que va quedando en Chile Continental.

Por otro lado, es un  lugar de nidificación para el pingüino de Humboldt, y por allí pasan más de cuatro tipos de cetáceos en sus rutas migratorias, como la ballena franca y la ballena fin; también hay zorros, roedores nativos como el cururo (Spalacopus cyanus), flora del desierto con alto nivel de endemismo como añañucas ( Rhodophiala rhodolirion) y pata de guanaco (Cistanthe longiscapa), entre otras especies de flora y fauna.

Así mismo, la recolección de algas y productos marinos es el principal sustento económico para muchos habitantes de la zona, por lo que un megapuerto de las características de Copiaport-e dañaría irreparablemente el patrimonio tanto natural, como cultural de esta costa. Noción que por ejemplo, es compartida por el sindicato N°1 de trabajadores independientes de la Etnia Changa de Caleta Maldonado, quienes en su mayoría son buzos ariscadores, pescadores artesanales y recolectores de orilla. Dentro de las observaciones señaladas en el SEA destacan que el proyecto tiene la intención de reubicar las casas del sindicato a caleta Maldonado “a un lugar aún no definido, sin acuerdo previo entre las partes, sin un plan de reasentamiento previo”. Aseguran, además, que a la fecha no tienen las garantías mínimas de que el proyecto  permita mitigar los efectos negativos de sus acciones y que en el estudio presentado por la empresa no están nombrados, pese estar en el lugar hace más de 50 años.  

Carol Medrano, bióloga de la ONG Qarapara, organización que se dedica a la investigación y conservación de las tortugas marinas que habitan en Bahía Chascos, coincide en que la realización de un mega proyecto de estas características afectará irremediablemente a la biodiversidad marina y terrestre de la zona. “Esta es la última agregación de tortugas marinas que va quedando en Chile continental, y nos parece aún más grave que no se proteja este lugar, considerando que nuestro país forma parte de la Convención Interamericana para la Protección y Conservación de las Tortugas Marinas (CIT) desde el  2001”, señala.

“Considero que este lugar tiene un valor, no solo patrimonial, para los pescadores y pobladores de las caletas aledañas, sino también turístico, es ideal para avistar más de 50 especies de aves y las playas son de las más lindas que existen en el país”, señala Medrano. “Hay una propuesta actual de Área Marina Protegida de Multiples Usos el cual puede ser un insentivo para los pescadores, mariscadores y algueros artesanales. Creemos que sería muy beneficioso para las personas más allá de los ofrecimientos de la empresa que no dan reales certezas sobre cómo se harán cargo de sus impactos”.

Luciano Travelli, geólogo que lleva años trabajando en ese territorio, ve en esta propuesta una esperanza para poder conservar el patrimonio natural y cultural de la zona, pues permitiría también realizar actividades de pesca artesanal y acuicultura, la principal fuente de ingreso de las comunidades aledañas, que son en su mayoría pequeñas caletas: Chascos, Maldonado y Pajonales. 

“El área marina protegida excluye cierto tipo de actividades, como proyectos industriales y además, define un plan de gestion basado en objetos de conservación, en este caso serían los de mayor valor biologico como las tortigas y los pastos marinos”, señala. Por estos días esta propuesta se encuentra en un proceso de socialización con la comunidad para ser informada de sus implicancias también, y podría ser aprovado por las autoridades regionales. Esta, tanto para Medrano como para Travelli, sería la forma más viable de detener este mega puerto.

Lamentablemente en Chile aún la legislación es muy deficiente ante este tipo de proyectos, y existen muchas aristas que aún no están resueltas, es por ello que la participación ciudadana es tan importante, cada observación ingresada puede hacer una diferencia para que la naturaleza pueda ser considerada en este proceso. Si quieres más informacion te invitamos a seguir las redes sociales de ONG Qarapara e ingregar a la ficha del proyecto de  Copiaport-E en el SEIA para leer o aportar con observaciones.

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