Javier Mery: capturando la esencia de la Patagonia salvaje

por Sep 29, 2024Naturaleza

Javier Mery, fotógrafo de naturaleza y amante de la fauna, nos lleva a uno de sus destinos favoritos: la Patagonia. Durante un mes, recorrió el Parque Nacional Torres del Paine y sus alrededores, incluyendo zonas desde Punta Arenas a Puerto Natales. Un viaje que más allá de la planificación necesaria contó con sorpresas, dónde la naturaleza recuerda su carácter impredecible.

La preparación fue fundamental para enfrentar esta aventura, especialmente debido al clima de la región, que puede variar de un momento a otro.“Es totalmente cierto que se pueden vivir las cuatro estaciones del año en un día”, asegura el fotógrafo que destaca que en Torres del Paine hay que estar preparado para todo. Para Javier, esa incertidumbre es la que le da un toque especial a la zona, los cambios en el agua potenciados por el sol y el viento, más la fauna, hace que todo cobre vida de una manera diferente. 

Antes del viaje: prepararse para la incertidumbre 

En cuanto a la planificación, cuenta que tomó más de un mes. Había diversos factores a considerar, desde el equipo técnico para capturar los mejores momentos, hasta la vestimenta adecuada para enfrentar el frío extremo. Además de la logística, las rutas y los alojamientos que también requerían un análisis previo para garantizar que el equipo pudiera moverse con eficacia en la Patagonia chilena.

 

Este territorio, que abarca desde las montañas nevadas hasta las amplias pampas que son el hábitat de una gran cantidad de animales silvestres, es conocido por sus aguas cristalinas, glaciares y sus furiosos vientos que pueden llegar a superar los 100 kilómetros. Enfrentar sus fluctuaciones requiere estar preparado, Javier sostiene que: “Uno de los elementos claves a la hora de fotografiar en este ambiente son los guantes, especialmente en invierno, ya que el viento intensifica la sensación de frío y las manos se congelan”.

Créditos: Javier Mery.
Un encuentro inesperado

Uno de sus momentos más memorables, ocurrió cuando menos lo esperaba. Mientras se preparaba para capturar una escena de caza, un grupo de  carroñeros, cóndores, águilas, caranchos y tiuques, se peleaban por un pedazo de carne de liebre. El águila, con sus garras, le agarraba el pecho al cóndor, pero justo en ese instante entró a la escena un zorro gris   que con decisión y coraje se abrió paso ante las imponentes aves y se quedó con la presa, antes disputada. El fotógrafo asegura que ahí se dio cuenta que había cumplido con el motivo del viaje: capturar la esencia de la naturaleza salvaje.

 “Fue tan lindo ver cómo las especies interactúan en el ecosistema y dependen las unas de las otras”, agrega. Equipados con cámaras de cine y un equipo audiovisual, el grupo logró obtener filmaciones de diversas especies de la zona, entre ellas: pumas, aves, zorros y delfines australes. “Fuimos a retratar todo lo que la Patagonia nos regalara”, afirma. 

Créditos: Javier Mery.
Créditos: Javier Mery.
El viaje de Javier Mery a la Patagonia no fue solo una oportunidad para capturar la belleza de la fauna y la vida silvestre, sino que formó parte de un proyecto más ambicioso, la creación de un documental de naturaleza, para el cual este hito, “fue un tremendo logro”, destaca el fotógrafo. Esta aventura se trata del segundo capítulo de lo que será un documental de destinos.

Con el éxito de esta experiencia, Javier ya tiene nuevos horizontes en mente, “quizás el Altiplano chileno, explorar las regiones de Arica y Parinacota”, afirma. Además revela que también estaría comenzando a mirar hacia el exterior del país, en busca de retratar a la fauna internacional.

Créditos: Javier Mery.

Últimas Historias

«Comunicando por una cultura consciente, sostenible y activa por el bien del planeta, nuestro único hogar»