La lucha de Pumakawa por la conservación de la especie en Argentina donde su caza aún es legal

Pese a no estar considerado en peligro de exintición, la conservación del puma en Argentina se hace necesaria más que nunca. Esa es la lucha de Pumakawa, el centro de rescate que ha logrado ponerle fin a criaderos ilegales y a la exportación e importación de trofeos de caza.

Cuando era pequeña, Kai Pacha veía cómo su padre y abuelo salían a cazar al monte para traer de vuelta algo que su abuela pudiera cocinar, en ese entonces esa era la forma de relacionarse con el territorio y lo que estaba muy arraigado en las costumbres. Nunca hicieron caza mayor, pero un día su padre mató a una corzuela, un ciervo pequeño que andaba con su cría. Cuando él la vio algo hizo click, decidió que no mataría de nuevo a un animal y se propuso crear una reserva que los protegiera.

Después de cuatro años de creado el centro de rescate “El Edén Flora y Fauna», como su padre estaba solo, Kai Pacha decidió volver a ayudarlo. Siempre estuvo en contacto con los animales, pero comenzó a aprender de a poco sobre su manejo en cautiverio. Ahí conoció a Cacu, una pequeña puma que había sido atacada por uno de los machos con los que vivía en su jaula y a la que Kai salvó. Pese a todo pronóstico sobrevivió y vivió por 22 años. Cacu fue su maestra, gracias a ella Kai aprendió a criar a los pumas, su lenguaje corporal y  su manejo.

Lamentablemente con los incendios del 2009 el lugar fue devastado, pero El Edén se transformó y literalmente obligó a todos a partir de las cenizas con una impronta más sustentable y con nuevos objetivos como Pumakawa. Liderados por Kai, son el único centro de rescate que se dedica principalmente al puma y a su conservación a nivel país.

“En Argentina los centros de rescate tienen pumas porque la verdad es que es un gran problema. Hay pumas a los que se los tienen de mascota o la gente los levanta de los campos siendo crías, entonces todos los centros de rescate tienen pumas, pero nosotros lo tenemos como primer lugar y como emblema. Trabajamos por la conservación a nivel país en varios puntos para que quede un mejor panorama de vida para ellos”, afirma Kai Pacha.

Kai Pacha con uno de sus pumas rescatados. Fotografía de Pumakawa.

Pumakawa, ubicado en Villa Rumipal, en la provincia de Córdoba, funciona en un predio de 25 hectáreas con bosque nativo reforestado y actualmente es hogar de 17 pumas, los que habían sido condenados al encierro como mascotas o rescatados de criaderos ilegales que proveen ejemplares a los cotos de caza, establecimientos privados donde los cazadores pueden pagar por el derecho a cazar dentro de sus instalaciones.

“Es una forma fácil de legalizar pumas extraídos del ambiente porque criar un puma es bastante caro, no es rentable. Es como una pantalla tener un criadero, pero en realidad lo sacas del ambiente por muy poca plata y lo legalizas como que nació en el criadero”, afirma Kai quien apoyados por Humane Society, comenzaron una campaña hace dos años para ilegalizar cuatro criaderos que surten a los cotos.

En dos de ellos, gracias al trabajo de Pumakawa, todos los pumas están ahora esterilizados para que no reproduzcan más crías. El centro además, recibió cuatro pumas de uno de esos criaderos y esperan recibir cuatro más como forma de ayudar a desarticularlos. Mientras aún trabajan para reubicar a los pumas del tercer y cuarto criadero, Pumakawa avanza a paso firme para terminar con ese negocio en La Pampa.

Uno de los pumas rescatados y recibidos por Pumakawa. Fotografía gentileza de Pumakawa.

Otro increíble logro del centro y las organizaciones con las que trabajan, fue que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible prohibiera el año pasado la importación y exportación de trofeos de caza de especies de la fauna silvestre nativa. Actualmente Argentina es el 7° exportador mundial de estos “trofeos” que se consiguen en los cotos de caza con la compra del servicio de cacería garantizada o enlatada, donde extranjeros -principalmente de Estados Unidos o Canadá- pagan un monto aproximado de 10 mil dólares para llevarse una parte del puma muerto.  

Esa persona ni siquiera tiene que caminar horas para encontrar un puma y cazarlo. Básicamente está en un lugar apostado con su arma o incluso sentado en una silla anatómica donde apunta hacia un lugar al que lo guían y allá donde da la mira le ponen una jaula con el puma preparado, sedados o con los pies lastimados para que camine mal, o sino le dan carne con mucha sal para que al abrirle la jaula se vaya directo al agua, todo eso para que pegarle un tiro sea lo más fácil posible y poder llevarse su cabeza u otra parte del cuerpo embalsamado. 

“Se llevaba el trofeo, porque esto ahora cambió. Nosotros estuvimos viendo que no es posible que del animal que maten se lleven el trofeo, porque en la taxidermia embalsamar al animal tarda 20 días más o menos, entonces el extranjero mata al puma y se lleva el trofeo, pero ese trofeo es de otro cuerpo muerto”, explica Kai. “También logramos que aerolíneas argentinas restringiera el traslado de trofeo de caza. Ahora hay otras tres líneas privadas con las que queremos lograr lo mismo”.

Puma rescatado por Pumakawa. Fotografía de Pumakawa.

Al igual que en Chile, el puma es el mayor depredador del país y aunque no se encuentra en peligro de extinción a nivel nacional, sí se encuentra catalogado como vulnerable en algunas zonas donde recibe más amenazas por parte de la actividad humana debido a su presencia en zonas rurales donde se cría ganado. A pesar de que se ha demostrado que la mayoría de las veces el puma ataca animales enfermos o debilitados, sigue existiendo una percepción negativa hacia esta especie. 

“La idea es revertir es imagen de perjudicial a beneficioso, porque hace muchas décadas que el puma mata el ganado y el hombre mata al puma pero esto no resuelve la situación porque el puma sigue impactando sobre el ganado porque después otro reemplaza al que muere en su territorio, entonces lo que hay que cambiar son prácticas rurales que los ahuyentes. Es un cambio de hábito de mentalidad en lo que hay que trabajar rápido”

Para este año, Pumakawa continuará con una intensa campaña para mejorar la imagen del puma en Argentina que llevarán a cabo principalmente a través de medios de comunicación y redes sociales. Además, contarán con un observatorio virtual, apoyado por casi 40 ONG, donde se reunirán una vez al mes para observar y controlar las acciones del Ministerio de Ambiente. Por ejemplo, seguirán la propuesta de eliminar la importación y exportación a través del observatorio hasta que se cumpla. Según Kai, esta estrategia requerirá una relación cercana y estratégica con el Ministerio para garantizar que se rindan cuentas. Además, se está trabajando en contenido para generar resoluciones y leyes para que los políticos tomen decisiones que ayuden a revertir la percepción negativa del puma.